Teresa, mi bisabuela querida, a la cual nunca conocí.
Tampoco conocí a sus hijos, entre ellos mi abuelo Miguel, sin embargo, sus historias siempre llegaron a lo más profundo de mi corazón, casi como si hubiésemos coincidido en algún momento.
Historias sobre todo la de ella, que conocimos hace muy poco tiempo, y a la cual aún le faltan piezas.
Teresa fue una mujer totalmente olvidada en la familia.
Su destino de muerte temprana en Brasil dejando dos hijos pequeños, José y Miguel; el segundo matrimonio de mi bisabuelo ( su marido), los 11 hijos que tuvo con su segunda esposa, el mudarse a Argentina con su segunda mujer, más las historias inventadas o mal contadas, el famoso “de eso no se habla”; hicieron que Teresa quedara en el olvido. Pero cuatro generaciones después, sobre datos y documentos históricos concretos colectados, Teresa salió a la luz…
La importancia de Teresa en la familia salió a la luz, al menos importante para mi.
Gracias a la valentía de Teresa, de volver a comenzar, gracias a que ella logró convertirse en madre, hoy existimos todos nosotros, su descendencia.